Así se vivió el Séptimo día SOUC 2023. (Iglesia Anglicana de la Reconciliación).

El 7o día del Octavario por la Unidad en Cristo 2023 nos reunimos en la iglesia Anglicana de la Reconciliación. Fuimos recibidos por el párroco Rev. Víctor Zuñiga y el Obispo anglicano Ilmo Oscar Pulido. Iniciamos la ceremonia por la unidad a las 7pm y nos compartieron la Palabra. En primer lugar el Señor Obispo anglicano Oscar Pulido y luego el hermano sacerdote Filomeno de los combonianos, luego el párroco católico de la parroquia de Santa Ana, Baldomero Zambrano y el hermano Miguel Siervo de la Palabra. El obispo nos habló del don de la gracia, nos habló de la entrega de la sierva María “Hágase en mi según tu Palabra”. A veces queremos tener control de todo, y la gracia es ponernos en las manos de Dios. La gracia se manifiesta en las acciones que realizamos en los desplazados.

El hermano comboniano Filomeno nos habló de que lo que nos unifica es la Palabra y el Dios de Abraham. Nos pide no olvidar de dónde venimos. El Dios de los pobres, de los huerfanos y de las viudas. En Brasil tuvo un encuentro ecuménico y a sus 24 años comenzó en su diálogo con otras denominaciones y comprometido con los pobres. En Belice en su parroquia vivió de cerca un conflicto y lo movieron a buscar la paz y la justicia. Y allá se hizo una ceremonia para pedir por la paz.

El padre dijo : nunca debes decir que no… Y la gente dice aprende a decir que no. María dice que sí y se compromete a vivir un sí. Si tenemos a Cristo como filtro, el nos ayuda al sí que compromete. ¿Que haría Cristo? Si nos configuramos con El, aplicaríamos muy bien la justicia. El hermano Miguel nos dijo que la proclamación de María habla de que solo Dios podía rescatarnos. Dios le anuncia que ella dará a luz al que nos va a salvar. Nadie más lo podrá hacer por sus propios medios, solo el Espíritu Santo. Cómo Dios pone al revés el esquema social en el cántico de María. A la que no podía tener hijo, Dios le da un hijo. Dios nos da un nuevo sentido. Nos pide no olvidar al necesitado. El Señor exalta al que está abajo y humilla a los alzados.

Una hermana nos platicó que hace 20 años llegó a la iglesia Anglicana. Se abrió a algo nuevo. Cómo había mujeres en el ministerio. Conoció otra cara de Dios que le habían presentado de un Dios castigador. Dios un ser de bondad. Encontró que no era una feligrés más. Que era tomada en cuenta. Que el señor obispo le nombraba por su nombre. Y nos dijo: aquí estoy dando aunque sea poco porque es mucho más lo que yo recibo. Aquí se me abrió esta oportunidad de vivir como hija de Dios. Ya son 20 años de estar sirviendo al Señor.

El reverendo Víctor Zúñiga invitó a un católico que nos diera su testimonio. Se acercó la hermana Vicky y nos dijo que el Señor ha estado cerca de ella. Y agradeció a sus papás que le dieron a Jesús y la acercaron a la Iglesia. Su mamá preparaba comida para jóvenes de medicina para 50 estudiantes. Sus papás son pastores Evangélicos y ellos nunca los presionaron a estar en una congregación.

Aquí están algunas imágenes: